lunes, 1 de octubre de 2012


Vencedora en competencia internacional en Berlín

Lufthansa, aparte de volar
Formó a la mejor chef joven del mundo

La mejor chef joven del mundo proviene del Centro de Entrenamiento y Convenciones de Lufthansa, líneas aéreas alemanas, en Seeheim. Christina Merz tiene 24 años y trabaja desde hace tres como Chef de Partie en el hotel para convenciones en la ruta Bergstrasse. El campeonato mundial de los jóvenes chefs se realizó por segunda vez en Alemania en la Cámara de Comercio e Industria de Berlín. La mayor y más antigua asociación de gastrónomos del mundo invitó a exitosos jóvenes chefs de 22 países al “Concours International des Jeunes Chefs Rôtisseurs 2012”; en éste, Christina Merz logró ubicarse delante de los demás jóvenes cocineros, mientras que el segundo lugar fue para el representante de Francia, seguido de cerca por el de Sudáfrica. “En el Centro de Entrenamiento y Convenciones de Lufthansa en Seeheim tuve las mejores condiciones para entrenar para este torneo mundial y prepararme de manera óptima”, dijo Christina Merz después de vencer. En este campeonato internacional se presentaron los 22 ganadores nacionales de la Chaîne des Rôtisseurs, provenientes de Francia, Estados Unidos, Alemania, Austria, Italia, Suecia, Finlandia, Japón, Canadá, Inglaterra, Sudáfrica, Noruega, Colombia, Indonesia, Bélgica, Israel, Turquía, Suiza, la Federación Rusa, Malasia, Taiwán y Australia. El concurso es denominado “torneo ciego”, es decir, los participantes se enteran poco antes de la competencia de los ingredientes a utilizar; luego tienen 30 minutos para crear un menú de tres platos dirigido a cuatro comensales y otras tres horas para elaborarlo. El menú es evaluado por un jurado internacional compuesto por chefs profesionales. Christina Merz cocinó la victoria con una entrada de mousse de camarones con jalea de vino, atún marinado y puntas perfumadas de lechuga sobre un relish de apio. Como plato de fondo, un dúo de cordero asado con costra de mostaza, escalfado con envoltura de hierbas y un toque de ajo con salsa de oporto, habichuelas a la mantequilla, zanahorias y calabacín  glaseados y un  borde de patatas a  la lima.  Como postre, praliné de chocolate, granizado de frambuesa, espuma de arándano y calamansi (especie de naranja ácida) marinadas. De esta manera, Lufthansa reivindica su programa de entrenamiento para cocineros en su Centro de Entrenamiento y Convenciones donde forma a los jóvenes talentos que brindarán la mejor experiencia de vuelo a los pasajeros con sus exclusivas creaciones culinarias.


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