jueves, 17 de mayo de 2012



                        Promueve Estudio
sobre desarrollo psicomotriz y su relación con el diseño ergonómico de los creyones y lápices
Faber-Castell, empresa internacional fabricante de lápices y artículos de escritura presentó este jueves ante la prensa el estudio denominado “El Desarrollo Psicomotriz y Grafomotor y su relación con el Diseño Ergonómico de sus lápices y creyones”. Una recopilación bibliográfica que pretende dar luces sobre cómo el diseño funcional de las herramientas de escritura, puede apoyar el proceso de aprendizaje de los niños en las primeras fases de la educación inicial. El estudio presentado, constituye la primera etapa de una investigación más amplia que se desarrollará en los próximos meses por parte de una reconocida institución académica y fue desarrollado por la profesora Irene Moledous, licenciada en educación graduada en la Unimet, con maestrías en Psicología del desarrollo en la UCV y en Gerencia de instituciones educativas. Es profesora e investigadora en el área de psicología del desarrollo en la Universidad Metropolitana y Directora del Centro de Educación Inicial Preunimet. Cuenta con 30 años de experiencia repartidos en educación de niños y niñas en edad inicial, así como de adolescentes y adultos tempranos en formación universitaria. Tiene 10 años como investigadora en diferentes estudios con metodología cualitativa y cuantitativa en el área de la educación, familia y psicología del desarrollo. Al ser consultada sobre cómo el usar las adecuadas herramientas puede favorecer los procesos de aprendizaje de la escritura, la profesora Moledous  respondió preguntas como: ¿Cuál es la importancia de un correcto agarre del lápiz? "En el modo de sujetar un lápiz o creyón está el éxito o fracaso de desarrollar una correcta escritura. Varios factores se deben considerar para que los niños aprendan a dibujar, colorear y escribir, como son el desarrollo físico y muscular y su edad. La forma de sujeción de las manos evoluciona paralelamente al crecimiento del infante, al desarrollar un mayor control de los músculos. Así, con el paso de los años evoluciona de la etapa de garabatos a la etapa de escritura formal". Asimismo destaca que: "No es raro, dice, que los problemas de escritura en niños y niñas pequeños estén vinculados al control inadecuado del lápiz. Incluso algunos estudiantes a partir del primer grado de la escuela básica manifiestan dificultades en el desarrollo de la escritura por no haber aprendido una praxis adecuada tanto en la adquisición de las destrezas motoras finas, así como no haber contado con materiales adaptados a este proceso de construcción”. Es importante que estén claros en que "un lápiz funcional es aquel cuyo diseño guarda las características que favorezcan las necesidades del niño y la niña en edades tempranas. En este caso específico las necesidades estarían centradas en las capacidades que ha desarrollado el infante en su motricidad fina, para la presión y agarre correcto del lápiz o creyón con su pinza trípode, apoyado en su dedo medio y ejerciendo presión con su dedo índice y pulgar Y ante preguntas como que: "¿Cuál es a su juicio el “lápiz perfecto” para aprender a escribir? "Es aquel que guarde las características ergonómicas que se adapten a las necesidades de desarrollo en la presión y agarre que el niño y la niña ha logrado en su motricidad fina. En un primer momento el agarre palmar, luego haciendo pinza con todos sus dedos apoyados en la palma de la mano, posteriormente con solo la pinza entre sus dedos, para finalmente comenzar apoyar en forma de trípode al comienzo con lápices y creyones más gruesos hasta llegar a los más finos que deberán luego continuar utilizando los adolescentes, adultos y personas de la tercera edad. Y ¿los beneficios del formato triangular?: Pues muy sencillo, son: Los instrumentos de escritura de forma triangular permite 67% de contacto con la mano (a diferencia del redondo con 46%) lo que proporciona mayor confort y control, facilitando una sujeción adecuada y reduciendo la fatiga al escribir. Desarrollan mayor facilidad para acomodar adecuadamente el lápiz en su mano. Mantienen más relajados los músculos al adoptar una posición adecuada.Los niños experimentan mayor control, mayor comodidad y menor fatiga  Evitan la frustración ocasionada por el gasto excesivo de energía física y mental, provocada por el uso de un grip apropiado. Y por último,  Los niños se divierten y mantienen el interés por dibujar, colorear y escribir. Saquen ustedes sus propias conclusiones






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