OPINIÓN en
Y QUE
Se sigue viendo
“La Espada de Bolívar” en busca de lograr la absoluta libertad de los pueblos
americanos, teniendo como principio acabar con el comunismo o socialismo mal
entendido de los gobernantes de la América de hoy, ya vimos lo sucedido en La
Argentina, luego en Bolivia y ahora vemos a la Presidenta de Brasil, Dilma
Rousseff, separada, democrática y constitucionalmente, de su cargo y que será
sometida a un juicio por las irregularidades y corrupciones, que presuntamente,
cometió en el desarrollo de sus funciones como mandataria y de ser responsable
será destituida de su cargo. Eso ha sido posible en un estado en donde los
Poderes Públicos son totalmente autónomos, por supuesto esto le permite aplicar
la Carta Magna con todo el sentido común expresado en su texto y cumpliendo con
las normas y principios legales establecidos En cambio en Venezuela no podemos
hacer eso, por ahora, ya que los Poderes Publico de nuestra nación están a la
disposición del Poder Ejecutivo, con excepción del Poder Legislativo, algo que
podríamos interpretarlo como la falta de valor ante situaciones difíciles,
peligrosas que conllevan ciertos riesgos y sus acciones se deben interpretar como
como actos de cobardía. Citaremos los dos recientes atropellos a nuestra
Constitución Bolivariana de Venezuela ellos son: Tratar que el proceso
revocatorio, contra Maduro, no se cumpla en los plazos establecidos y el
impedimento de que el sector democrático realice manifestaciones en el
Municipio Libertador Es bueno dejar claro que cuando hablamos de cobardes y
miedosos nos referimos a todos aquellos del régimen que reprime a los sectores
democráticos del país, ya que su proceder son las acciones propias de los
miedosos y los cobardes. Sin lugar a dudas, ya que en vez de potenciar la unión
de nuestro pueblo y permitir el libre juego de nuestra democracia la está
destrozando por deseos de poder e inconstancias en sus actos de gobierno. En el
diccionario castellano miedoso significa que tiene miedo de cualquier cosa y
eso es lo habitual del actual régimen que le da miedo ver a los demócratas en
las calles, ampliemos un poquito que es cobardía podríamos definirla como un
vicio que comúnmente se considera como la degeneración de la prudencia,
degeneración que lleva a toda anulación del valor. La cobardía se puede
considerar como un exceso de miedo tal, que son incapaces de encarar las
consecuencias que pudieran derivar de ese juego democrático señalado anteriormente.
Estamos claro en nuestra ruta por lograr la salida del actual mandatario de
Venezuela y por ello, los violentos segundones del régimen no nos desviaran de
nuestro camino de apego a nuestras Carta Magna y a las leyes vigente,
recordemos que somos demócratas y esa son nuestras reglas, nada alterará el
camino escogido hacia nuestra libertad, sin miedo y como dijo el general
Eleazar López Contreras: “Sin prisa, pero sin pausa” y a él le toco hacer la
transición de la dictadura de Juan Vicente Gómez a un Estado de derecho que no
debemos permitir se rompa por gobernantes incapaces, cobardes y mentirosos y
poder logar esa misma transición en un ambiente de paz y de unión de los que
hoy piden a grito el 85% de los venezolanos revocar al presidente Maduro. Recordemos,
hoy más que nunca debemos unirnos para alcanzar nuestro objetivo, el cual no es
otra casa que la libertad y la democracia de nuestro pueblo Hágalo fácil
Nicolás Maduro renuncie.
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