OPINIÓN
Artículo de opinión ¡SIN DESPERDICIO! del colega Aníbal Benshimol en el diario LA VOZ
¿Quién
podrá defendernos?
Salomon Benshimol R
El primer impacto que reciben los
afiliados es el aumento del Vale de Servicio que se debe cancelar al acudir a
las consultas, solicitar exámenes de laboratorio, imágenes, entre otros
servicios
Quizás hablar de Sanitas Venezuela
merece un reconocimiento especial por la extraordinaria labor que siempre le ha
prestado a sus afiliados, pero realmente no sabemos qué le ha pasado en el
último año, ya que los desmedidos aumentos lo hacen inaccesible para la gran
mayoría de sus usuarios.
Realmente se hace necesario analizar el
balance de los aumentos de todos aquellos afiliados que han tenido con ellos
muchos años, podríamos decir desde su fundación, pero que al parecer ya esos
afiliados de edad avanzadas y muchos otros con diferentes patología le son
incomodos y tratan de sacarlos aumentando sus servicios en forma escandalosa, y
bien sabemos que la gran mayoría no podrá soportar y deberán retirarse de tan
prestigiosa institución de la salud en Venezuela.
Haciendo historia, vale la pena decir
que todos los años se hacían ajustes en los precios de las mensualidades que se
debían cancelar sus afiliados y de una u otra forma estos podían ser
absorbidos, en mayor y menor grado, por esos afiliados, pero la verdad es que
con sus valores actuales se hacen insoportables y que deberían ser investigados
por los entes gubernamentales de velar por los costos de los seguros; aunque Sanitas Venezuela no es un
seguro como tal, pero sí cumple la función de ser un servicio de medicina
pre-pagada y debe ser controlado por
algún organismo del Estado venezolano.
El primer impacto que reciben los
afiliados es el aumento del Vale de Servicio que se debe cancelar al acudir a
las consultas, exámenes de laboratorio, imágenes, entre los otros servicios y
exámenes respectivos.
A principio del año pasado, ese vale
comenzó costando la cantidad de 420 bolívares, debido al aumento respectivo con
relación al año anterior, pero el caso es que sin previo aviso ese vale pasó a
costar 700 bolívares a mitad de año y este año comenzó con un valor de 1.300
bolívares. Solo preguntamos: ¿eso es justo?
Pero el martirio no termina ahí, este
año, según nos cuenta un afiliado, que cuando fueron a cancelar la mensualidad,
la cual en el año anterior era de 8.420 bolívares mensuales, se encontraron con
la “agradable sorpresa que tenían que cancelar la tontería de Bs. 37.424
bolívares mensuales.
Le preguntamos a los señores del Estado venezolano que tienen que ver con
la materia: ¿es justo tan descomunal aumento?, ¿cuántos de los hoy afiliados
son capaces de pagar dicho aumento? Que conste que no se trata de un caso
determinado, ya que hay miles de afiliados que deben cancelar mucho más de lo
aquí mencionado.
Nuevamente dejo constancia que los
servicios siempre son prestados con una excelente calidad y que el personal que
trabaja en dicha institución y los médicos y otros profesionales o no que le
prestan servicio a Sanitas Venezuela, son de primer orden.
Pero la realidad es sencilla, serán
muchos los que tendrán que retirarse. Inquiero saber: ¿a dónde acudirán en busca
de salud los que deben retirarse de Sanitas Venezuela por no poder pagar las
cuantiosas sumas que ahora les exigen? Por otro lado: ¿a dónde acudirán si
sabemos que el Estado venezolano no está en capacidad de atenderlos?
Qué tristeza, si no se toman en cuenta
los costos de Sanitas Venezuela, muchos tendrán que retirarse y han de morir de
mengua a las puertas de los hospitales del país.
Piensen en el pueblo y Venezuela y tomen
una justa medida para evitar lo inevitable en la falta de prestación de salud
para los venezolanos.
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